INGREDIENTES

1,5 kg de mejillones
100 ml aceite de oliva virgen extra
100 ml de vinagre de vino blanco
100 ml de vino blanco
1 cucharada de pimentón de la Vera
Pimienta negra en grano
2  dientes de ajo
3 hojas de laurel

PREPARACIÓN Y COCCIÓN

Limpiamos los mejillones. Descartamos los que estén rotos o abiertos. En una cacerola grande ponemos el vino blanco, 2 hojas de laurel, pimienta negra en grano y los mejillones. Los hervimos tapados a fuego fuerte durante 2 minutos. Transcurrido este tiempo, los escurrimos. Reservamos unos 100 ml del agua de la cocción, que colaremos. Esta agua de cocción es la mezcla del vino y del agua de mar que sacan los mejillones.
Separamos los mejillones de las valvas, eliminando los que no se hayan abierto, y los colocamos en el recipiente de vidrio donde haremos el escabeche.

Preparación del escabeche
Fileteamos los ajos y los incorporamos a una sartén con el aceite  frío y la hoja de laurel que queda.  Doramos ligeramente los ajos, retiramos la sartén del fuego, añadimos una cucharada de pimentón de la Vera, mezclamos con cuchara de madera y añadimos rápidamente el vinagre y el agua de cocción de los mejillones, para evitar que el pimentón se queme y quede amargo.

Añadimos el escabeche al recipiente de vidrio donde tenemos los mejillones. Deben quedar completamente cubiertos. Dejamos templar y guardamos en la nevera.

PARA SABER MÁS

Los mejillones en escabeche se pueden consumir cuando se enfríen, pero están mucho más ricos si han reposado unas cuantas horas de nevera.
En la nevera se conservan  bastantes días.
Para comerlos, los sacamos de la nevera un rato antes para que pierdan frío y podamos apreciar el sabor intenso del escabeche.
Esta receta nos la ha explicado nuestro buen amigo Chef Biktor

RESULTADO

Unos mejillones en escabeche caseros, riquísimos, para hacer el vermut, alguna tapa y disfrutar.

Montse y Júlia