INGREDIENTES

200 g de azúcar moreno ecológico
200 g de harina de trigo integral y ecológica
4 huevos de tamaño normal (50 g)
1 dl de aceite de oliva virgen extra
1dl de zumo de naranja natural
1 piel de naranja rallada
1 piel de limón rallada
1 cucharadita de café de semillas de cilantro
1/2 cucharadita de café de jengibre molido
1/2 cucharadita de café de nuez moscada en polvo
1/2 cucharadita de café de canela en polvo
1 punta de cucharilla de café de pimienta negra molida muy fina
3 bolitas de pimienta de Jamaica
3 clavos de especie
3 cardamomos
1 pizca de sal
1/2 sobre de levadura en polvo

 

PREPARACIÓN Y COCCIÓN

Machacamos en un mortero los cardamomos, utilizamos las semillas del interior. Añadimos el cilantro, la pimienta de Jamaica y los clavos. Lo trabajamos con la maza del mortero hasta que quede bien triturado. Añadimos en el mismo mortero el resto de las especias molidas,  mezclamos  y reservamos.

En un bol batimos los huevos y el azúcar con varillas eléctricas. A continuación añadimos  el aceite, el zumo de naranja y mezclamos. Incorporamos las ralladuras de la naranja y del limón, removemos envolviendo con la espátula. Seguidamente ponemos las especias molidas que tenemos dentro del mortero. Mezclamos la harina con la levadura y la sal y tamizamos sobre el bol de los huevos batidos. Mezclamos en dos o tres veces, envolviendo suavemente con la espátula hasta que quede una mezcla homogénea.

Llenamos los moldes con la masa. Ponemos un papel dentro de cada cavidad y llenamos hasta 3/4 partes de su capacidad. Las magdalenas suben mejor si las  dejamos reposar en la nevera entre 30 minutos y 1 hora.  Antes de hornear, añadimos  un poco de azúcar sobre las magdalenas. Calentamos el horno a 220 ºC, calor  arriba y abajo,  introducimos la bandeja, esperamos 5 minutos y bajamos la temperatura a 200 ºC.

Horneamos 15 minutos. Pinchamos las magdalenas con un palillo y si sale limpio ya están hechas. Paramos el horno y esperamos 5 minutos antes de abrirlo. Dejamos la puerta del horno abierta 5 minutos más antes de sacar las magdalenas. Las dejamos enfriar a temperatura ambiente y guardamos.

RESULTADO

Unas magdalenas diferentes y sorprendentes. En cada mordisco iremos descubriendo los sabores y los aromas que hemos incorporado. 

Júlia.